Las Yagrumas

La instalación es una JOYITA. Las áreas son una belleza, sobretodo las áreas verdes que las mantienen con una limpieza excelente, los árboles con sus nombres y plantas de orquídeas en sus troncos (florecidas antes de época) que brindan un paisaje fantástico. La limpieza de todas las partes de la instalación es impecable, con un esfuerzo sobre humano para mantenerlas así por las constantes lluvias propias de esta temporada. El trato en la recepción (desde que uno entra) es muy profesional brindando una acogida amable y afectuosa. El servicio de las camareras es fantástico y personalizado con cada huésped. La gastronomía es excelente (pese a la falta de abastecimientos propios del país), platos muy bien elaborados y con una presentación exquisita. UN RECONOCIMIENTO MUY ESPECIAL PARA EL JEFE DE COCINA (desconozco su nombre), pero en mi opinión es uno de esos trabajadores que no se encuentran con facilidad, con un trato que no hay palabras para describir y que son de las personas (trabajadoras en servicios gastronómicos) que están en peligro de extinción. Mi más sincero RECONOCIMIENTO para él. La instalación cuenta con un río y un embarcadero de lujos. La piscina (a pesar de las lluvias diarias, que es conocido que afectan el agua de estas) la mantienen que es un cristal, me atrevo a afirmar, que tanto en tamaño como en limpieza, es la mejor piscina de todos los hoteles que existen en Cuba. Las habitaciones son súper confortables y con una pulcritud admirable. En resumen la estancia en este hotel es una de esas experiencias fantásticas que uno no olvida nunca. Es increíble ver y vivir, como con tan pocos recursos logran brindar un servicio de tanta calidad y EXCELENCIA. Mis felicitaciones a todo el colectivo de trabajo de este hotel y mis más sinceros agradecimientos por hacerme pasar una estancia tan agradable que jamás olvidaré.