La Posada de Madryn

This is a small hotel in a quiet part of the city. When you walk in the lobby area and bar are pleasant and appear comfortable and is decorated with some antiques. However when you pass the lobby our impression quickly started to change. The hall is narrow and creates any echo which means when someone talks in the hall in a normal voice it seems loud to everyone else. The doors to the rooms are narrow and the walls thin. Our standard room was on the small side and spartan. There was a small area for hanging clothes but two good spots to but suitcases. The room was brightly lit. The bed was not really a double but 2 twins but together. They were comfortable enough. The room was chilly though and we had to request a heater which was quickly supplied. The room did not even have a single chair and the general feel of the room was dated with the two small bed tables looking worn as the room looked in general. The bathroom was just adequate in size. It had a small but nice granite countertop but the sink had several cracks. The shower head was old fashioned and provided a narrow stream of water. Water pressure was good and usually quite hot. However one night about 10:30 it was only lukewarm. The room was clean. Staff were friendly especially the servers for dinner. However the breakfast server was grumpy, never smiled or said good morning. It was quite cool in the restaurant at breakfast some people even wore jackets. There was a grassed back area with some lovely roses and a few large trees. The pool was a reasonable size but the water too cold for swimming. My general impression was that management was trying to trim costs and letting the place run down.

Muy lindo hotel. Muy linda decoración. El restaurante tiene una cocina exquisita! La mejor comida de Madryn. Para mejorar: el piso de los pasillos hacen mucho ruido y se escucha desde la habitación. La piscina no estaba lo suficientemente calefaccionada, no nos pudimos meter. Una pena porque es hermosa así como el jardín.

Excelente opción para alojarse. Como cosas a mejorar se puede sugerir, la posibilidad de poner aires individuales en cada habitación y un frigobar . Lo más destacable, además del patió y la pileta es la Excelente atención y las opciones del resto. A nosotros nos atendió Brenda y la verdad nos hizo disfrutar de una cena maravillosa y cómoda.

La habitación era muy cómoda en planta baja con puerta ventana al jardín divino. La pileta climatizada hermosa, cómodas reposeras. El restaurante con muy buen servicio.Lo único a tener en cuenta es que está alejado del centro y a 9 cuadras de la playa más cercana

PROS: El jardín es muy amplio y muy lindo ambientado, la atención es muy buena y también las instalaciones.El desayuno es variado y muy completo. El jugo de naranja exprimido es, lejos, uno de los mejores. El budín de zanahorias también. Tiene un hogar a leña hermoso que tira muy bien. riquísimo.Contras:  hay ciertos horarios del baño que no hay agua caliente, evitar bañarse en horarios pico con otros huéspedes. Desde los baños se escucha los ruidos de la habitación de al lado.

Excelente, en esa palabra,resumo la experiencia vivida en el lugar. Comida,muy dedicada,al igual que la atención de todo el personal. La decoración romántica es perfecta. Gracias y Felicitaciones. Volveríamos sin dudarlo